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Austrinus es el sitio de astronomía de Farid Char.
Este espacio fue inaugurado el 25/11/2000 y su nombre significa “austral” o “del sur”, en latín.

Este nombre sirve para identificar mejor el origen de sus contenidos, creados desde el hemisferio Sur: 23°39' S y 70°25' O (Antofagasta, Chile).

En astronomía, el nombre está presente en la constelación Piscis Austrinus.


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Desmitificación

Horóscopo y astrología

El caso de Plutón

Queda tiempo para mencionar un detalle más: como no vale la pena detenerse en que los planetas no tienen influencia sobre nosotros, quiero destacar un aspecto que termina por derrumbar más a la astrología. El 24 de agosto de 2006, la Unión Astronómica Internacional (IAU por su sigla en inglés) dictó resoluciones respecto a la definición oficial de “planeta”, debido a controversias que generó el descubrimiento de ciertos objetos más allá de Plutón.

El resultado fue que nuestro Sistema Solar hoy se compone de 8 planetas -Mercurio, Venus, Tierra, Marte, Júpiter, Saturno, Urano y Neptuno-, 5 planetas enanos -Plutón, Ceres, Eris, Makemake, Haumea- y los cuerpos menores del Sistema Solar. Se le quitó a Plutón el status de “planeta” y ahora entra a la categoría de “planeta enano” junto con Ceres (previamente el mayor asteroide del cinturón entre Marte y Júpiter), Eris, Makemake y Haumea (estos últimos, más lejos que Plutón).

Ser o no ser planeta… esa es la cuestión

¿Qué podrá decir la astrología al respecto? Se han metido en problemas. O reconocen que en los 76 años que Plutón se consideró planeta ellos estaban equivocados, y no debieron considerarlo en sus “cálculos”, o reconocen que también estaban errados porque en este tiempo debieron considerar a Ceres, Eris, Makemake y Haumea, ya que supuestamente también “influyen” en las personas. Aunque lo más sencillo sería reconocer que hay *millones* de objetos merodeando en el Sistema Solar, que definir a qué se llama “planeta”, “planeta enano”, “satélite” o “asteroide” sólo tiene que ver con una serie de tecnicismos y sólo nos ayuda a clasificar mejor nuestro Universo, pero mejor aún, reconocer que las “influencias cósmicas” son inexistentes y se apoyan en datos arbitrarios.

La física reconoce 4 fuerzas que rigen todo el Universo, llamadas fuerzas fundamentales: interacción nuclear fuerte y débil, la gravedad y el electromagnetismo. Haciendo un análisis, no es difícil darse cuenta que la fuerza de un dedo al mecer la cuna de un bebé, ejerce mucha más “influencia” que la de cualquier planeta a millones de km de distancia.

El tema da para mucho, pero sería innecesario proseguir. Con estos razonamientos debería quedar claro por qué el horóscopo no tiene validez, así como la astrología en general. Esta antigua mezcla de ciencia, religión y creencias lentamente fue escindiéndose en el tiempo, y aunque la astrología no deja de ser importante históricamente por su origen prácticamente simultáneo con la astronomía, ésta última tomó su propio camino y es la que hoy en día nos dice la realidad científica sobre los cuerpos celestes, de la que tanto nos maravillamos.