¡Bienvenido!

Austrinus es el sitio de astronomía de Farid Char.
Este espacio fue inaugurado el 25/11/2000 y su nombre significa “austral” o “del sur”, en latín.

Este nombre sirve para identificar mejor el origen de sus contenidos, creados desde el hemisferio Sur: 23°39' S y 70°25' O (Antofagasta, Chile).

En astronomía, el nombre está presente en la constelación Piscis Austrinus.


Conoce más información sobre el autor, sus iniciativas personales, tienda online y contacto.

También puedes revisar más detalles sobre Austrinus y sus condiciones de uso.


© 2022 Austrinus. Versión 13.0
Changelog • Estadísticas • Creado desde un Mac 


  • fotografias
  • astrofotografias
  • videos
  • rss
  • about
Planetas

Venus

Venus es el segundo planeta del Sistema Solar y el más semejante a la Tierra por su tamaño, masa, densidad y volumen. Los dos se formaron en la misma época. Sin embargo, es diferente a la Tierra. No tiene océanos y su densa atmósfera provoca un efecto invernadero que eleva la temperatura hasta los 480 ºC. Es un ambiente abrasador.

Los primeros astrónomos pensaban que Venus eran dos cuerpos distintos, porque unas veces se ve poco antes de salir el Sol y otras, justo después de la puesta. Venus gira sobre su eje muy lento y en sentido contrario a los otros planetas (el Sol sale por el Oeste y se pone por el Este). La superficie de Venus es relativamente joven (300~500 millones de años) con presencia de amplias llanuras, atravesadas por enormes ríos de lava, y algunas montañas.

Venus, el ‘gemelo’ terrestre

A Venus se le suele considerar el “gemelo” de la Tierra, debido a ciertas similitudes con nuestro planeta, tales como tamaño y masa; sin embargo, en un análisis profundo resaltan grandes diferencias. Venus tiene muchos volcanes: el 85% del planeta está cubierto por roca volcánica. La lava ha creado surcos, algunos muy largos. También hay cráteres de los impactos de los meteoritos; aunque sólo los grandes, porque los pequeños se deshacen en la espesa atmósfera.

Uno de los aspectos más notables es la gruesa capa de nubes que rodea al planeta, provocando un terrible efecto invernadero que absorbe el calor y eleva su temperatura. Esta capa impide ver la superficie por observación directa, usando instrumentos infrarrojos. No obstante, este aspecto causa que Venus tenga un altísimo albedo, es decir, mayor cantidad de luz solar reflejada, siendo el 3º astro más brillante después del Sol y la Luna. La presión atmosférica es 90 veces mayor que la terrestre y en su composición química predomina el dióxido de carbono. Otra cualidad notable es su lenta velocidad de rotación, frenada por la gravedad del Sol, lo cual produce que el día en Venus (243 d) tarde más que su año (225 d).

Exploración espacial de Venus

Las sondas que pasaron por Venus revelaron la presencia de montañas que tienen su cúlmine en los Montes Maxwell con 11 kms. Esta información sólo se pudo obtener a través del radar, que detectó estos detalles imposibles para un observador común.

Las sondas Venera 9, 10, 13 y 14 se posaron sobre su superficie y revelaron rocas de bordes filosos y rocas ígneas en su superficie. El tiempo fue escaso porque, dada la gran temperatura existente en el planeta, las sondas soviéticas tuvieron aproximadamente 1 hora en hacer su trabajo antes de derretirse completamente.

En abril de 2006, la sonda Venus Express de la ESA realizó sobrevoló el 2° planeta del Sistema Solar y realizó diversos estudios sobre la atmósfera venusiana. Uno de sus descubrimientos fue un raro isótopo de dióxido de carbono que fortalece su efecto invernadero.

Tabla de datos de Venus